Los mercados siguen fuertemente influidos por los dos acontecimientos notables de los últimos días: la última publicación de datos sólidos sobre el empleo en EE.UU. y el resultado de las elecciones al Parlamento Europeo.

En cuanto a las estadísticas procedentes de EE.UU., indican claramente que es poco probable esperar una inversión a la baja del índice de precios al consumo o inflación al consumo, que, según los últimos datos, se mantiene notablemente por encima de la deseada marca del 2%, en el 3,4% interanual. En realidad, esta noticia rebajó notablemente las expectativas de la comunidad inversora de que la Fed pueda acometer su primera bajada de tipos en septiembre. En este contexto, los rendimientos de los bonos del Tesoro subieron y el dólar recibió apoyo. Además, la ola de negatividad tuvo un impacto notable en el mercado de criptomonedas, que últimamente ha reaccionado con nerviosismo ante las perspectivas del inicio de los recortes de los tipos de interés en Estados Unidos.

Y ahora prestemos atención a los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo y cómo pueden afectar a la dinámica del euro.

La creciente presencia de euroescépticos en esta estructura supranacional aumenta el factor de incertidumbre de la futura política de la UE tanto en relación con la crisis ucraniana como en la economía de la región. Y la reciente decisión del BCE de recortar los tipos de interés en un 0,25% y la posibilidad de que continúe la relajación de la política monetaria no hacen sino reforzar el debilitamiento de la moneda única, que en par con el dólar puede caer hasta 1,0600 ya esta semana. Aquí, por supuesto, el papel principal lo desempeña y desempeñará la divergencia de los tipos de interés del BCE y de la Fed, que empezó a decantarse a favor del dólar.

La tasa de inflación de la eurozona se sitúa en el 2,6%, la región necesita claramente medidas de estímulo debido al curso económico y político extremadamente absurdo que está destruyendo la economía de la región y luego colapsando la propia entidad política, bastante antinatural. Por lo tanto, es probable que el BCE se vea obligado a seguir relajando la política monetaria, lo que debilitará el euro frente a la libra esterlina, el franco, el dólar e incluso el yen. Valorando estas perspectivas como reales, ante un cierto fortalecimiento local del euro, éste debería ser vendido frente a las divisas mencionadas y, especialmente, frente a la divisa estadounidense.

¿Qué cabe esperar hoy en los mercados?

Creo que el fortalecimiento del dólar puede continuar si los datos sobre la inflación al consumo en Estados Unidos presentados mañana no son inferiores a las previsiones de consenso. Es muy probable que se mantenga incluso si los valores de la inflación están en línea con las expectativas. Sólo su descenso puede inspirar de nuevo a los agentes del mercado y reavivar el tema de los recortes anticipados de los tipos de interés por parte de la Fed.

En cuanto a la dinámica de hoy, creo que es probable que los inversores se muestren muy cautelosos a la espera de la publicación de las cifras de inflación al consumo. Esto significa que la dinámica en los mercados será débil y poco expresiva.

Previsión del día:

AUD/USD

El par se cotiza justo por encima del nivel de 0,6600. El hecho de que no se produzca un descenso de la inflación en Estados Unidos puede llevar al fortalecimiento de la tendencia bajista, y en este contexto el par podría caer primero a 0,6560 y luego a 0,6535.

GBP/USD

El par muestra un patrón de inversión triangular divergente. Si la inflación en Estados Unidos no desciende, el par podría romper 1,2700 y caer a 1,2600.